Hay una circunstancia en nuestras vidas mucho más frecuente que la relativa a los contratos de mantenimiento de ascensores, que es la que se nos ha presentado cuando hemos querido cambiar de compañía de telefonía móvil y si lo hacíamos antes de los plazos fijados, se nos aplicaba una multa por incumplimiento de contrato, que podríamos catalogar de abusiva, así que nos hemos visto obligados a continuar con la citada compañía el tiempo necesario y estipulado por ellos, con el único objeto de librarnos de pagar esa cantidad desorbitada de dinero, por marcharnos a otra compañía que nos ofrece mejores condiciones económicas que con la que estamos.

Esta circunstancia tan vivida por los usuarios de telefonía móvil, es trasladable al complejo mundo del mantenimiento de ascensores en Madrid o en cualquier otra ciudad del territorio español. Las cláusulas abusivas existen, es decir, aquellas en las que la empresa tiene el poder y cuyos acuerdos o términos, siempre van en perjuicio del cliente y a favor de la compañía. Nuestra responsabilidad es informarnos sobre las diferentes empresas de montaje de ascensores en Madrid (http://ascensorescervera.com/), podemos empezar por ésta y seguir estudiando y barajando otras posibilidades, a continuación, revisaremos las condiciones de sus contratos de mantenimiento y, una vez, que veamos que se trata de un trato justo y equitativo, decidirnos por tal o cual empresa de elevadores.

Valga como ejemplo para no incurrir en el error de caer en manos de una empresa con cláusulas abusivas y que atenta contra los derechos de los clientes, el  hecho de que algunas compañías te obligan a permanecer con ellas a largo plazo, hasta 10 años en algunos casos, penalizaciones desproporcionadas, plazos de preaviso de no querer continuar con el citado contrato, con hasta 6 meses de antelación... Se podría decir, sin temor a equivocarnos, que es muy complicado cambiarse de empresa de mantenimiento de ascensores. La buena noticia es que si nos encontramos en este caso, tenemos a nuestra disposición, instituciones en defensa del consumidor que pueden servirnos de gran utilidad.

Pero, haciendo caso al refranero español que afirma que "más vale prevenir que curar" lo mejor es asegurarnos de que no se trata de un contrato abusivo, antes de firmarlo, así evitaremos problemas futuros.